Apuesta por Scania con un vehículo de gas para el transporte de leche

2027

La empresa de Rubén Martínez ha vuelto a confiar en Scania al incorporar hace un año uno de sus camiones propulsado por gas natural licuado.

Scania GNL

La empresa familiar de Rubén Martínez, que lleva más de cuarenta años dedicada a la recogida y transporte de leche, lleva también más de dos décadas confiando en Scania. Además, desde hace un año, apostando por el cuidado del medio ambiente al incorporar un Scania propulsado por gas natural licuado (GNL). Reconociendo en este tipo de combustible una opción económica y ecológica para el transporte profesional.

La empresa albacetense empezó su andadura de la mano del abuelo de la familiar, realizando recogidas en una pequeña furgoneta con la que transportaba la leche. A medida que la ganadería evolucionó, ellos también, intentando estar siempre por delante en temas de innovación y tecnología. Siempre buscando las mejores aplicaciones para su transporte. Así, se convirtieron en la primera empresa española con un vehículo de gas dedicado a la recogida y transporte de leche.

Scania GNL

Más económico, más ecológico

Juan Manuel Martínez, responsable de compras de la empresa, ha comentado que “confiamos en Scania desde hace más de veinte años y cuando nos propusieron optar por el GNL para nuestro transporte, no lo dudamos. Hoy, después de un año realizando nuestra ruta a diario con este camión, nos sentimos orgullosos de contribuir con el medio ambiente al ayudar a reducir las emisiones de CO2”. “Además, el precio del combustible nos resulta más económico que con los tradicionales y la autonomía y los tiempos de repostaje son similares”, ha añadido Juan Manuel.

La empresa cuenta actualmente con diez camiones, seis de los cuales son Scania. El trabajo que realizan sus tractoras Scania R450 es nacional con plataformas basculantes. En el caso de los rígidos Scania, disponen de un P400, un P410, un P450 y su última adquisición, el GNL G410 CV de tres ejes y 26 toneladas. Con él, se encargan de la recogida de leche en ganaderías y fábricas en un radio de aproximadamente 150 kilómetros y recorriendo un total de 400 kilómetros diarios. Este vehículo de gas tiene una cabina integral de media altura adecuada para casi todo tipo de transporte y un interior espacioso que permite la fácil movilidad del conductor y gran capacidad de almacenaje.