Comida miembros Grupo Facebook el Transporte de año nuevo
Ponerle cara a los amig@s
Así el pasado 10 de enero más de un centenar de miembros del Grupo el Transporte acudían a la primera cita de 2015 convocada por los administradores del grupo, con el único punto en la orden del día consistente en disfrutar y pasarlo bien.
Junto a una buena comida y la presencia de buenos amigos entre los aficionados al transporte y los clásicos de la ruta, parte del atractivo consistió en ponerle cara a los conocidos y amigos que han ido surgiendo a través de internet, a la vez que algunos de los miembros del grupo acudían aportando parte del espectáculo con sus propios vehículos.
Pegaso versus Peterbilt
Esta ha sido la primera ocasión en que la celebración de dicha comida de año nuevo incluía también la posibilidad de traer el vehículo. De modo que se juntaba una pequeña pero destacada representación de la flota del Grupo. Eso sí, en pocos lugares resulta fácil unir una espectacular tractora Peterbilt 377 con un Pegaso Capitoné de chasis Comet.
El Pete forma parte de la flota de los Hermanos Vila, Alvi Trucks, más que conocidos gracias a los muchos trompos que durante sus participaciones en las carreras de camiones del circuito del Jarama son capaces de realizar. En concreto se trata de un Peterbilt 377, un modelo que en los USA marcaba toda una época al tratarse de un vehículo que sin abandonar la imagen de exclusividad de cualquier Peterbilt era capaz de aportar una excelente economía de utilización. Fue el modelo de la marca de PACCAR, si la misma PACCAR de DAF y Kenworth entre otras marcas, que dio a conocer en las rutas de Norteamérica las líneas aerodinámicas. Peterbilt ya había intentado con el modelo sin morro, Cab Over Engine (COE) tipo 362 la creación de una tractora más aerodinámica para que las grandes flotas de transportes del apís lograsen una mejor eficiencia.
Sin embargo los gustos tradicionales de los transportistas Norteamericanos no encajaron precísamente bien que Pete, la marca más emblemática para los truckers, abandonase los diseños espectaculares en favor de los perfiles aerodinámicos. En 1987 con el lanzamiento de la serie 377 Peterbilt lograba algo parecido a la cuadratura del círculo; un camión de morro, conventional, de líneas aerodinámicas pero sin renunciar a la posibilidad de equipar un gran sleeper, dormitorio, junto a escapes verticales, depósitos de aluminio y un bonito capot adornado con la marca Peterbilt. El éxito fue tal que el camión se mantuvo en producción hasta el 2000 y de hecho marcaría la tendencia para muchos de los vehículos pesados posteriores…
La bella tractora tres ejes Pete 377 de los Vila es uno de esos vehículos, en este caso equipado con un contundente motor Caterpillar. Toda una delicia contemplarlo en esta reunión de amigos de El Transporte.
Pegaso Capitoné
Pero si ya de por sí en nuestro país resulta un placer muy poco común poder admirar un camión tan típicamente americano como es el caso del Pete 377, en este caso además pudimos compararlo con toda una rareza, aunque de profundas raíces nacionales… Nos referimos a todo un clásico, el camión de Mudanzas tipo Capitone , todavía decorado con los colores de la empresa gallega para la cual trabajó. Estos grandes furgones fueron muy apreciados entre las empresas de mudanzas, especialmente en los años 60 y 70, cuando prácticamente ningún modelo contaba con cabina abatible y por tanto resultaba posible plantearse una carrocería integral, que incluyera tanto la caja para la carga como el habitáculo delantero para sus ocupantes. Comida miembros Grupo Facebook el Transporte
El Capitoné que aquí nos ilustra está realizado sobre un chasis Pegaso, del modelo Comet para un peso total de 13.200 kilogramos. Estos camiones revolucionaron el transporte español desde su aparición en 1960, gracias a lo fiables, robustos y buen resultado que dieron. Debían su nombre, Comet, al modelo equivalente de la marca británica Leyland. Pese a que el camión de Leyland era un modelo con cabina de morro, lo cierto es que elementos como la transmisión y el motor fueron realizados a partir de patentes Leyland, mientras que la cabina, mucho más compacta en el caso del Comet español, fue un diseño propio y ofrecía mejor maniobrabilidad. En el caso de las empresas de mudanzas, los furgones tipo capitoné, caracterizados por que podían aprovechar también como zona de carga la parte superior de la cabina, se utilizaban para empresas de mudanzas. En su interior las paredes acolchadas protegían adecuadamente los muebles de roces y golpes, nada extraño dado el estado de la red viaria española de hace 5 o 6 décadas y más teniendo en cuenta como eran las suspensiones de ballestas del momento.
Respecto a carrozar un camión normal, como el Comet original, con un furgón o bien realizar un capitoné como es que aquí vemos, a cambio de un mayor precio pues se carrozaba de modo artesanal incluso la zona de la cabina, se obtenía una cabina de grandes dimensiones interiores. Se solía aprovechar para permitir el viaje en una segunda fila de asientos de todo el equipo de mudanzas o bien para incorporar una amplia zona de descanso para los viajes más largos. Algo poco habitual en los camiones del momento y que hacía de los conductores de este tipo de capitoné auténticos privilegiados del momento. Desde luego la admiración que generaban entre el resto de camioneros era similar al entusiasmo que ahora levantan entre los aficionados a los camiones clásicos.
Así que ya veis, gracias a esta reunión de amigos del Grupo del Transporte pudimos admirar dos camiones muy especiales y desde luego dos vehículos que raramente hubiesen rodado juntos en sus ambientes de origen, las rutas norteamericanas en un caso y las de la España de los 60 en el otro. Comida miembros Grupo Facebook el Transporte